2021, año europeo del ferrocarril

Este 2021 ha sido designado como Año Europeo del Ferrocarril por la Unión Europea. Estamos por tanto en un año crucial para celebrar las bondades de este transporte y su excelente rendimiento durante la pandemia, así como de plantear nuevas infraestructuras dentro del Pacto Verde Europeo.

Esta iniciativa pretende fomentar el ferrocarril como medio sostenible y seguro, y ahondar en el avance hacia un espacio ferroviario europeo único. Dentro de este objetivo se encuentran acciones como la Estrategia de Movilidad Sostenible e Inteligente e iniciativas como Shift2Rail, la revisión del reglamento RTE-T y el cuarto paquete ferroviario para la armonización en Europa.

El objetivo final es incrementar el peso del ferrocarril en el transporte tanto de personas como mercancías, algo que se estima como crucial para alcanzar en 2050 los objetivos de neutralidad climática.

Al mismo tiempo, la Asociación FERRMED seguirá trabajando para impulsar una optimización del cambio modal en la UE que permita solucionar los cuellos de botella. Una mejora de la eficiencia que pueda lograr que para 2030, el 30% del tráfico de mercancías terrestre sea por ferrocarril.

La importancia del ferrocarril en la pandemia

La efeméride llega justo en un momento en que el transporte ferroviario ha demostrado su solvencia. Aunque la pandemia impactó en el transporte de mercancías al reducirse la ocupación de los trenes, el tren dió muestras de gran operatividad en un escenario crítico.

De hecho, el ferrocarril ha sido una de las opciones más utilizadas para el traslado de material sanitario, gracias a la fiabilidad y puntualidad que garantiza. Destaca en el caso español la conexión ferroviaria Yiwu-Madrid que sirvió para traer mascarillas y EPIS desde China.

En el escenario post-pandemia, el tren también debe jugar un papel importante en la recuperación sostenible del transporte y la economía de la UE.

La red ferroviaria de mercancías en España

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se ha sumado a las celebraciones del Año Europeo del Ferrocarril, con actividades que serán coordinadas por la Fundación de Ferrocarriles Españoles.

Y es que el tren es una herramienta fundamental para la logística y la multimodalidad española, con una red de autopistas ferroviarias y conexiones ferroportuarias en plena ebullición.

El Ministerio de Transportes continúa avanzando en la tramitación del anteproyecto de modificación de la Ley del Sector Ferroviario, un nuevo paso en la liberalización del sector. Paralelamente, Transportes trabaja en el plan Mercancías 30, que incluye medidas para que el ferrocarril siga ganando cuota en el transporte de mercancías, aumentando en eficiencia y la digitalización.

En cuanto a inversiones de cara a este 2021, se pondrá el foco en los corredores Mediterráneo y Atlántico, destinando 5.700 millones de los fondos europeos para la recuperación tras la pandemia al sector ferroviario. Con ello se busca acercarse a los objetivos de la descarbonización del transporte.

En concreto, se impulsará el Corredor Mediterráneo mediante 1.982 millones. Esta inversión estará principalmente centrada en afianzar las conexiones ferroviarias con los puertos y centros intermodales, así como a la digitalización. Aunque las obras no han parado en zonas como Cataluña, es necesario acelerar el ritmo en tramos como el que une Antequera y Algeciras y la conexión Murcia-Cartagena.

Paralelamente, Transportes sigue avanzando en el desarrollo del Corredor Cantábrico-Mediterráneo, poniendo el foco en la variante Sagunto-Teruel-Zaragoza, cuya inversión hasta 2023 es de más de 386 millones.

Potenciando la multimodalidad

El desarrollo de la multimodalidad se presenta como fundamental, dando prioridad al desarrollo de las conexiones ferroportuarias para potenciar el movimiento de mercancías. En los planes para ADIF este 2021 destaca el refuerzo de enclaves nodales, como la terminal de Valencia-Fuente San Luis, Vicálvaro o La Llagosta.

Entre estos nodos, destaca Júndiz (Alava), enlazada con el Puerto de Bilbao y que será la primera terminal ferroviaria en territorio español articulada con el Corredor Atlántico, lo que permitirá albergar trenes de mercancías de 750 metros de longitud y ancho europeo.

Desde la Autoridad Portuaria de Bilbao se destaca el apoyo de todas las administraciones a este hub ferroviario y su conexión al Corredor Atlántico, lo que permitirá poner en marcha la autopista ferroviaria Júndiz-Frontera francesa, un trayecto por el que los operadores han mostrado interés, según Adif.

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