Cómo realizar una correcta estiba de la mercancía en el transporte por carretera

La estiba es un proceso fundamental en el transporte de mercancías por carretera que, si se realiza de manera errónea o negligente, puede ocasionar muchos quebraderos de cabeza. Los más importantes, los accidentes.

Sin embargo, es un aspecto que hasta ahora quedaba en gran parte a la buena voluntad del transportista. Por ello, hay que acoger como buena noticia que el pasado 2 de junio de 2017 se aprobara el Real Decreto 563/2017, que regula las inspecciones técnicas a los vehículos de carga dentro del territorio español y que ha entrado en vigor en mayo de 2018. Pero, ¿qué implica esto para quien pretenda enviar mercancías por carretera?

Concretando la ley para adaptarse a la UE

Cabe destacar que la nueva ley de estiba es mucho más precisa que lo anteriormente dispuesto en el Reglamento General de Circulación. En su artículo 14, reflejaba que las cargas en camión no se debe “arrastrar, caer total o parcialmente o desplazarse de manera peligrosa”, “comprometer la estabilidad del vehículo” ni “producir ruido, polvo u otras molestias que puedan ser evitadas”.

Resulta obvio que esta regulación apenas apuntaba un concepto sin proveer de unas reglas efectivas para asegurar la carga sobre un camión. Esta situación derivaba en la circulación de vehículos de carga con apenas control y por tanto, creando riesgos potenciales propios y ajenos. Y es que se estima que la incorrecta estiba de las cargas es un factor primordial en los accidentes del transporte. Aún sin hablar necesariamente de mercancías peligrosas, una mala estiba de carga, como la utilización de un inapropiado método de sujeción, es factor de incidencia en entre un 25 y un 45% de los casos.

Además, la nueva ley viene a enmendar un vacío legal que no podía continuar dentro de la Unión Europea, a cuya Directiva 2014/47 EU se amolda la nueva ordenación.

Inspecciones técnicas más severas

Cumplir con esta normativa es imperativo desde ya, pues la DGT ha anunciado que va a realizar más de 15.000 inspecciones técnicas al año y la Guardia Civil está ya preparada para detener vehículos y comprobar si cumplen los requisitos. Serán exámenes realizados sin previo aviso y que escrutarán los certificados de inspección técnica del vehículo, así como inspecciones visuales de la sujeción de la carga, entre otros aspectos.

La nueva normativa regula en su Anexo III toda la casuística y materiales de la estiba, por ejemplo el número de amarres a colocar, su capacidad de amarre o el empaquetado para el transporte. Ahora queda detallado en la ley con todo tipo de consideraciones físicas y técnicas.

En otras palabras, se acabó eso de sujetar la carga como uno vea oportuno. Al cargador corresponde presentar unas fichas de estiba homologadas que especifican aspectos como el vehículo usado, la técnica empleada para el amarre y el número de elementos a usar o la tensión necesaria para contrarrestar las fuerzas derivadas del movimiento del vehículo en marcha.

Además, en toda la Unión Europea los requerimientos de seguridad son análogos y también las inspecciones, convirtiendo la nueva exigencia en algo estrictamente necesario para cualquiera que quiera mover mercancías por carretera. Su incumplimiento puede conllevar sanciones económicas e inmovilización del vehículo.

La importancia de una gestión de principio a fin de la estiba

En resumen, la nueva ley exige evitar durante el transporte todo movimiento de la mercancía, como el deslizamiento, la inclinación, el balanceo, la deformación sustancial y la rotación de la carga mediante métodos de cierre, bloqueo, amarre o una combinación de ellos para proteger tanto a las personas que participan en el proceso de la estiba como al conductor y a otros usuarios de la carretera.

Una nueva ley de estiba que, al ser más estricta, pone de mayor relevancia el papel de empresas especialistas en cargamentos de manipulación especial que se encarguen de todo el proceso, desde la planificación inicial del transporte hasta la carga de la mercancía y por último, la autoinspección de seguridad para comprobar que todo está correcto. Es el caso de Bilogistik, cuya flota de camiones está totalmente preparada para que tu mercancía llegue con todas las garantías de seguridad a su destino, sin que tú tengas que preocuparte por nada.

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